Independiente a las razones que puedan llevar a una persona a tomar una desición de esta naturaleza, y no pretendiendo establecer un juicio en este tema tan controversial y polémico, el siguiente poema lo hice cuando tenía unos 15 años, pensando desde la perspectiva de un bebé.
Este poema fué la salvación de mi hermana (Hérica) para su tarea de español, cuando le pidieron presentar una poesía, al final le pidieron decirla para toda la escuela, ganó un concurso de poesía, y la invitaron a una escuela más para también declamarla.
Y para que no sea literatura muerta como dice el maestro Oscar Hernandez de Mexicali, después de más de 20 años, la exhibo en este espacio para darle vida y no dejarla morir.
__________________________________________________
Déjame vivir
Muchas
parejas tienen problemas,
porque no hacen las cosas como deben hacerlas,
se adelantan sin estar casados,
y no piensan en las consecuencias.
Por lo
regular acuden al aborto,
piensan que así se acabarán sus problemas,
creen que el bebé no dirá nada,
puesto que
no piensa con certeza.
Pero
imagínese usted al bebé,
en ese rincón oscuro,
pensando y defendiendo,
lo que tanto
anela y es suyo, imagínese;
¡Qué
contento estoy de tener vida!
¡Ya voy a cumplir tres meses de concebido!,
¡qué
rápido pasa el tiempo!
Y yo aquí, medio dormido.
Pero, ¿queé
es lo que escucho?
¿Eres tu
papá?
¿Qué es lo
que gritando le dices a mamá?
¿están
hablando de mi, verdad?
¡Oh, ya han
dejado de hablar!
Ya no puedo
escuchar,
que lástima,
¿Qué es lo
que pasará?
Ahora parece
que mamá va a salir,
se ha subido
al carro con papá,
me parese
que no queria ir,
pero al final decidió aceptar.
Nunca había
sentido a mamá tan nerviosa
algo malo estará pasando,
no se han dirigido una palabra en todo el
camino
y mamá acaricia el estómago,
pero como si
estuviera llorando.
¡Oh, ya
hemos llegado!
Y ahora
hablan de un doctor,
dicen que es
la primera consulta,
y que no lo
conoce ninguno de los dos.
Pronto bajan del auto
a un lugar callado han entrado,
se oye una voz gruesa,
una que
jamás habia escuchado.
Y ahora,
hablan de unos fierros,
que a mi me
van a encajar,
que me van a hacer pedazos,
¡y que me van a tirar!
¿Qué es lo
que estoy escuchando?
Aquí algo
anda mal,
no le he
hecho nada a nadie,
¡no me tienen por que matar!
¡Mamá!, no
permitas que hagan eso,
que yo no quiero morir,
yo quiero
ser un niño,
y quiero
aprender a vivir.
¿Por qué no
quieren que yo
a tu lado pueda estar?
Para
abrazarte y quererte,
y para decirte mamá.
No dejes que
hagan eso
¡que yo quiero
vivir!
Quiero respirar ese aire,
que tanto he anelado sentir.
¡Mamá, que
no me maten, por favor!
Si una
oportunidad tú me das,
yo te garantizo mamita mia,
que seré el
hijo más bueno,
que haya existido en toda la vida,
¡Mamá por
favor, que no me maten!
He escuchado
que el doctor
ha dicho que yo no soy vida,
que si el me saca ahora,
menos problemas tendrás en tus dias,
pero, ¡tú no
le hagas caso!
Yo para ti
seré tu alegría,
y aunque te
ecuentres muy triste
te alegraré, porque me haz dado la vida.
¡Mamá,
mamita!
Déjame
disfrutar de un poco de la vida,
como tú la disfrutaste, cuando eras una niña.
Déjame
mojarme bajo las gotas de la lluvia
y poder sentir el agua que por las mejillas me
escurra.
Déjame
correr,
déjame
sentir,
déjame soñar,
y dejame
vivir.
Permiteme
entrar en tu mundo
que estoy tran ansioso de conocer,
permiteme ser un hombre
y que de la vida pueda aprender.
Que no me maten mamita mia,
porque estoy en la etapa fetal,
porque a
pesar de que soy un feto,
puedo escuchar y palpar.
Cuídame como
a tu vida,
no dejes que
me hagan daño,
ponte en mi
lugar mamita mia,
y creeme que estoy llorando.
Qué padres
tan inresponsables,
que fácil
para ellos acabar con una vida,
si lo mismo hubieran hecho con ellos,
ellos también hubieran suplicado; vida.
Oh pobres
criaturas que pagan las consecuencias
que culpa
tienen ellos del error cometido,
por qué les
tienen que arrebatar su existencia,
por qué no pensaron los padres antes de ese
capricho.
Desgraciadamente
asi es la vida,
muchos niños mueren día a día.
Niños que no
pueden crecer y ser personas,
ni disfrutar
del amor de una familia.
Martyn R.
